Se presentan varios aspectos a considerar al emprender un negocio en esta época tan especial que es la navidad:
Creatividad: debemos olvidarnos de las ideas que ya no impresionan a nadie. La oferta de un producto novedoso y original, representará, para los clientes potenciales, la solución al desafío de causar una buena impresión en esta temporada.
Planificación: si se quieren conseguir los precios más bajos, las materias primas adecuadas, las mejores condiciones para comercializar nuestro producto, (además de evitarnos aglomeraciones y tensiones), lo mejor es que se empiece hoy mismo a trazar el plan de acción para el negocio navideño elegido.
Personalización: si algo puede hacer más atractivo un producto o un concepto, es ese toque único que lo aleja de la producción masiva.
Buen gusto: cualquiera que sea el proyecto que emprendamos, hay que recordar que se debe dar a cada detalle su importancia. La calidad, la sencillez, el balance y el colorido son factores esenciales.
Precio: en cualquier emprendimiento que se inicie, por más pequeño que sea, siempre se tendrán muchos competidores (existentes o potenciales) alrededor. Este factor, aunado a las vicisitudes del mundo económico actual, hace que debamos agudizar nuestro ingenio al máximo.
viernes, 6 de noviembre de 2009
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